La tercera etapa de The Coastal Challenge volvió a demostrar que, en una prueba multietapa, nada está decidido hasta el último día. Los casi 48 kilómetros que llevaron a los participantes hasta Playa Ballena, con la cascada Nucaya como punto más destacado, fueron un perfecto ejemplo de lo que es esta carrera icónica: tramos técnicos, calor, humedad y kilómetros a través de ríos.
Esta tercera etapa fue la elegida por Erick Agüero, corredor local y veterano de ediciones anteriores, para dar su golpe de efecto, liderando la etapa desde el inicio, conociendo perfectamente los complicados primeros kiómetros. Un altísimo ritmo del que poco a poco se iba descolgando Mauricio Méndez, el líder en esos momentos, si bien le aguantaban el ritmo Andy Simmonds y Cody Lind. Finalmente logró descolgarlos y vencer en la etapa consiguiendo también el liderato provisional de una clasificación tremendamente ajustada con tan sólo cuatro minutos de diferencia entre unos puestos de podio de los que se ha descolgado Méndez.
En categoría femenina Kaytlyn Gerbin continúa sin dar opción a sus rivales y volvió a vencer con autoridad en la etapa, sumando el tercer triunfo y aumentando la ventaja en la general que, salvo catástrofe, no debería escapársele.
Fue un día tremendamente complicado para Manu Vilaseca. Tras un buen comienzo, ya adaptada al calor y la humedad, la rotura del sistema BOA de sus zapatillas le hizo perder bastante tiempo hasta que alguien le ofreció unas zapatillas de repuesto. Por si fuera poco, la falta de marcaje (por un posible sabotaje) hizo que se saliera del trazado casi cuatro kilómetros, perdiendo 45 minutos.