La edición 2020 de la Everest Trail se aplaza a 2021. La incierta situación actual a nivel mundial ha hecho que, a tres meses de su celebración, la Organización de la prueba opte por el aplazamiento a noviembre de 2021. El décimo aniversario de la carrera referencia por etapas en el Himalaya, por tanto, tendrá que esperar un año.
El pasado 18 abril, desde la organización de la Everest Trail Race, se tomo la decisión de seguir adelante con la celebración de la 10ª edición de la prueba. Los datos que se manejaban en ese momento, eran de una incidencia mínima de la Covid19 en Nepal, con menos de 10 casos activos y ningún fallecido, que sumado a una rápida y contundente acción de las autoridades, cerrando fronteras y confinando a la población, a casi 8 meses de la prueba, presagiaban buenas perspectivas para su celebración.
Lamentablemente a día de hoy, a algo más de 2 meses de la prueba, la situación es muy distinta y los motivos son diversos: de una parte, muchísimos países han establecido medidas de emergencia con el objetivo de evitar la propagación del virus, lo cual supone un gran problema para algunos de los participantes inscritos, que o no pueden salir de sus países o se les imponen cuarentenas a su regreso. También es del todo probable, que en el caso de que Nepal reabra sus fronteras y aeropuerto, cerrados aun a día de hoy, mantenga restricciones a ciudadanos de muchas nacionalidades, y dado el perfil internacional de la ETR, con toda seguridad habría afectaciones a algunos de los participantes.
A todo ello hay que añadir que a pesar de que Nepal ha sido sin ningún género de dudas de los países de su entorno, que ha tomado las decisiones más valientes y restrictivas dirigidas a frenar la expansión de la pandemia, su contención, al igual que en muchísimos países del mundo, no está siendo posible.
Por todo ello y muy a su pesar, la organización se ve obligada a aplazar esta 10 edición a noviembre de 2021, concretamente del 10 al 22 de noviembre del próximo año. El primer y principal objetivo como organización, es la de velar siempre por la seguridad de los participantes, las especiales características de la Everest Trail Race así lo requieren, y este es principal motivo que nos ha llevado a tomar esta decisión.
A casi 3 meses de la celebración de la carrera no podíamos esperar más y seguir con una incertidumbre que empezaba a complicar la logística de carrera que ya debía empezar sus preparativos equipando campamentos.
La decisión no ha sido nada fácil, la Everest Trail Race es para todos mucho más que una carrera por eso nos entristece muchísimo tomarla. Espero que nos podamos reencontrar en noviembre de 2021 y os deseamos lo mejor en unos momentos tremendamente complejos e inciertos para todos.