Toman asiento, callados y guardando dos metros de distancia, en un amplio espacio del Annecy Design Center (ADC) de Salomon, en los Alpes franceses. Son unas 10 personas, todas ellas especialistas en producción textil con décadas de experiencia conjunta. Son las personas que trabajan en el centro de prototipos textiles de Salomon, y normalmente estos creadores con un talento sin igual se dedican a fabricar prototipos para la futura gama de productos de ropa de Salomon, como, por ejemplo, calzado, chaquetas, mochilas, forros para las botas de esquí y mucho más. Hoy, no obstante, están fabricando mascarillas protectoras que se utilizarán en las próximas semanas para protegernos de la propagación del COVID-19. El objetivo es entregar 90.000 mascarillas entre los meses de abril y junio.
Este proyecto es diferente, pues habitualmente trabajan con corredores de montaña como Kilian Jornet, François D’Haene o Courtney Dauwalter sobre una mochila nueva, una solución de hidratación o la fabricación de un forro más cómodo para las botas de esquí nórdico. De hecho, la variedad de productos al aire libre con la que suele trabajar este grupo es asombrosa. Sin embargo, ahora están centrados únicamente en un solo producto.
Dada la escasez de mascarillas protectoras en el país, el gobierno francés ha hecho una llamada nacional a la industria textil francesa. Con las herramientas industriales listas para ayudar, una compañía francesa llamada Chamatex propuso una solución: mascarillas textiles multicapa lavables y reutilizables. Estas mascarillas están certificadas por la DGA (Direction Général de l’Armement) y se destinarán principalmente a administraciones e industrias de todos los sectores empresariales en un futuro próximo.
A raíz del aumento de la demanda de mascarillas en los últimos días, Salomon recibió una llamada de Gilles Reguillon, director ejecutivo de Chamatex, con el fin de crear sinergias entre las empresas y conociendo la capacidad de Salomon para producir prototipos de cualquier clase. En menos de cinco días, el equipo de Salomon ya se había puesto manos a la obra en la ADC para fabricar mascarillas.
«Chamatex es una compañía francesa que ha sido socia industrial de Salomon desde hace más de cinco años», afirma Guillaume Meyzenq, vicepresidente de Calzado de Salomon. «Hemos utilizado su tecnología MATRYX en varios modelos de nuestro calzado premium. Comparten con nosotros la misma pasión por la innovación y tienen un talento único para fabricar materiales textiles innovadores».
A pesar de sus ganas de ayudar, el equipo del centro de prototipos de Salomon se tuvo que quedar en casa, como todo el mundo en Francia desde hace algunas semanas, para cumplir con las restricciones de seguridad implantadas por el gobierno. Aun así, la semana pasada, Salomon recibió la llamada de Chamatex porque necesitaban sus servicios.
«Nos gusta decir que, en un día normal, por la mañana podemos fabricar un prototipo que ayude a Kilian Jornet a llegar a la cima del Everest y, por la tarde, un sujetador deportivo para nuestra gama de running», dice Jean-Noel Thevenoud, director del laboratorio de prototipos. «Así que para nosotros este es un proyecto diferente, pero el equipo ha demostrado sus ganas de colaborar desde que empezó esta crisis. Cuando nos llamaron la semana pasada, ya estaban todos listos. Pronto volveremos a diseñar nuestra ropa de deporte al aire libre, pero ahora nos enorgullece poder utilizar la experiencia de nuestro equipo en tiempos como el que vivimos».
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