A las 00:00 horas del sábado dio inicio la prueba reina desde Benasque. Centenares de personas acompañaban a los 260 participantes que tomaron la salida. Por delante, nada menos que 105 km y 6.760 m de desnivel positivo.
En la categoría masculina, pronto un cuarteto formado por Antonio Dávila, José Luis Calvo, Urko Valdivielso y Ion Azpiroz tomó el mando. Hicieron equipo durante toda la noche para superar juntos la parte más salvaje del recorrido, con el collado de Salenques (2.820 m) como techo. La bajada de Estiba Freda fue clave para el desarrollo de la competición. Dávila, Calvo y Valdivielso apretaron el acelerador mientras que Azpiroz, más experimentado, decidió dejarlos marchar.
Así pasaron por Benasque (km 55), con el primer bucle alrededor al Aneto completado, pero el sobreesfuerzo pronto hizo mella en los hasta entonces líderes. José Luis Calvo, con problemas estomacales, tuvo que retirarse en la primera subida a Cerler, tramo en el que Ion Azpiroz volvió a conectar con el grupo de cabeza. La subida al collado de Forqueta (2.860 m) puso a cada uno en su lugar, a Azpiroz en el primero y a Urko Valdivielso y a Antonio Dávila compitiendo por el segundo.
Finalmente fue veterano Ion Azpiroz quien se llevó la victoria con un tiempo de 16 horas, 35 minutos y 16 segundos en la línea de meta. “Ha sido impresionante, me ha sorprendido mucho la cantidad de gente que había animando por el recorrido. Es mi cuarta o quinta vez aquí, había subido al podio, pero nunca había ganado, así que estoy muy contento”, ha compartido el guipuzcoano, que culmina con esta victoria una compleja lesión en el tobillo que le ha tenido apartado durante casi 3 años. Tras él, Urko Valdivielso (17:20:33) se subió al segundo cajón del podio y Antonio Dávila (18:42:04) en el tercero.
Entre las chicas, Leticia Bullido dominó con mano de hierro desde los primeros kilómetros y fue abriendo distancia con el resto de corredoras a medida que superaba los numerosos escollos del trazado. Si su margen tras el anillo del Aneto era de casi 30 minutos, tras el del Posets ascendió a más de 2 horas.
“Es mi primera vez aquí. No conocía el recorrido, lo que me iba a encontrar, pero me ha sorprendido una carrera maravillosa. Los últimos kilómetros se han hecho duros por el calor, pero era algo de lo que ya estábamos avisados. Me gustaría repetir en otra de las distancias para ver de día algunos de los lugares tan bonitos por los que hemos pasado de noche”, ha explicado la corredora madrileña, que paró el cronómetro en 19 horas, 57 minutos y 36 segundos.
Las siguientes posiciones también fueron estables durante gran parte del trazado, siendo Pilar Montesinos (22:00:33) y Esther Fernández (22:50:02) las otras dos corredoras en el podio.
Ya por la mañana, a las 07:00 horas, partió la Vuelta al Aneto, de 55 km y 3.630 m, con 627 participantes en el arco de salida. Marta Molist y Alberto Torres fueron los claros vencedores de una prueba que lideraron desde el principio.
La catalana, vigente campeona de España de Ultras, dejó una gran marca de 8 horas, 40 minutos y 26 segundos. “Ha sido más duro de lo que esperaba por la gran cantidad de piedras y por el calor. Incluso he tenido que beber agua directamente del río, algo que no suelo hacer porque te puede sentar mal, pero no tenía otra opción”, reconocía la corredora de 40 años, a quien esperaba su familia en línea de meta. Eli Ríos (9:07:50) fue segunda y Nuria Orta (9:35:19), tercera, mientras que la primera aragonesa fue Julia Pérez (9:51:39), que se hizo con el título autonómico.
En la categoría masculina se vivió uno de los momentos para el recuerdo de esta novena edición del GTAP. El ganador Alberto Torres, que también se proclamó campeón de Aragón de Ultras, aprovechó su entrada triunfal en meta para pedirle matrimonio a su pareja, que aceptó ante la curiosa mirada del público. “Ha sido un día perfecto. Mi chica también es atleta y está pasando una temporada difícil por las lesiones, así que pensé que esta victoria tenía que ser para celebrarlo con ella”, explica el corredor de Vinaroz (Castellón), afincado en Biescas (Huesca), que paró el crono en 7 horas, 19 minutos y 48 segundos. La segunda plaza fue para Cristian Callau (7:24:19) y la tercera para Etor Etxeandia (7:34:11).
A las 08:00 horas, con una hora de adelanto para esquivar en lo posible las altas temperaturas, partieron los 728 participantes del Maratón de las Tucas, con sus 42 km y 2.500 m positivos por el valle de Estós.
En lo competitivo, Anna Comet ha sido la gran protagonista de la prueba, llevándose la victoria y el récord femeninos con 5 horas, 16 minutos y 24 segundos. Además, la de Scarpa se ha llevado un meritorio con tramos muy técnicos en los que hay que ir con cuidado para no hacerse daño. Esto es alta montaña y para los que la amamos es un gusto pasar por estos sitios”, reconocía la atleta catalana, internacional con España y vencedora de pruebas tan prestigiosas como el Marathon des Sables. Segunda fue la balear Ángels Llobera (5:48:03), mientras que la oscense Laura Labarta (5:51:38) ha sido tercera.
Entre los chicos, el valenciano Borja Gallardo se impuso entre los chicos con un tiempo de 4 horas, 34 minutos y 10 segundos, quedándose a aproximadamente 3 minutos del récord que ostenta Marcos Ramos desde 2021. “Fui cuarto aquí en 2019 y desde entonces pensaba en venir a intentar mejorarlo. Este año, que estoy entrenando mejor, lo he podido conseguir bajando en 13 minutos mi propio tiempo, así que estoy muy contento”, explicó el corredor de 24 años, que apenas compite. Tras él, el aragonés Alberto Lasobras (4:44:24) y el segoviano David López (5:03:41) han completado el podio.
A las 08:00 horas del dominfo partió la carrera de 25,5 km y 1.250 m positivos con 566 participantes. El argentino Diego Simón, que ya fue segundo en el Kilómetro Vertical, se ha proclamado vencedor con un tiempo de 2 horas, 11 minutos y 29 segundos. “Esto es precioso y me siento muy querido aquí, con la gente animando durante todo el recorrido. He dado todo lo que tenía y al final ha salido bien”, reconocía el atleta, que ya venció en 2018. El francés Romain Lacaste (2:13:18) y el aragonés Sergio Serrano (2:15:12) fueron segundo y tercero, respectivamente.
Entre las chicas, la alicantina Pilar Medina ha sido la primera en llegar a Benasque, tras 2 horas, 37 y 1 segundo de esfuerzo. Tras ella, Patricia Villanueva (2:44:59) y Ainara Urrutia (2:48:49) completaron el podio. “He disfrutado, pero también sufrido mucho. Es una carrera muy rápida y por tanto muy exigente. Eso sí, los paisajes lo hacen todo mucho más llevadero. Había estado por aquí de vacaciones y siempre quise competir en esta carrera tan multitudinaria y prestigiosa”, ha detallado la vencedora.
255 corredores tomaron la salida a las 09:00 horas para enfrentarse a los 10,7 km y 460 m positivos de la modalidad más corta y explosiva -y no menos meritoria- del GTTAP. Tras ser tercero en 2018 y segundo en 2019, Álvaro Osanz se llevó por fin su primer triunfo en Benasque. El jacetano paró el crono en 49 minutos y 3 segundos. “He puesto mi ritmo desde el principio y me he conseguido escapar en la primera subida. A partir de ahí, he regulado para volver a apretar en la parte final de descenso hacia Benasque”, ha detallado el atleta internacional. Carlos Jávega (54:36) y el legendario Raúl García Castán (56:03) le han secundado en el podio.
La categoría femenina también ha tenido una clara, la corredora del equipo Trangoworld, Sonia Martín, que ha cruzado la línea de meta en 1 hora, 2 minutos y 8 segundos. Tras ella, Andrea Barranco (1:09:30) y Martina Laplana (1:12:51) han sido segunda y tercera. “Hoy mi cerebro solo pensaba en correr, correr y correr. Tras hacer el Maratón de las Tucas el año pasado, esta vez tocaba una distancia más corta, pero igualmente dura y preciosa. Espero volver también el año que viene”, ha expresado la ganadora