Ayer, día de inicio de la PSR2018, la primera etapa llevó a los corredores a cruzar el Parque Natural de les Capçaleres del Ter i Freser, subiendo a la cima del Balandrau (2585m), con unas panorámicas espectaculares. El Camí dels Enginyers ha llevado la carrera hasta el Santuari de Núria, para acabar bajando en Queralbs por el Camí Vell tras 34,3km, 2180m d + y 1890m d-.
La etapa ha sido muy tranquila, con predominio del buen tiempo y muy buenas sensaciones para todos los corredores. Sin embargo, uno de los componentes del equipo islandés se ha retirado y ha sido el único abandono del día.
El primer equipo mixto que ha cruzado la meta ha sido Trota Cims: Harriet Kjaer y Gerard Martínez han tardado 5h y 17min completar la etapa. En segunda posición, el grupo TJ Packa Praha Trailpoint, formado por Kristyna Hajkova y Filip Saidl, ha necesitado 5h y 49min para completar la etapa. Y la tercera posición por equipos mixtos lo ocupa Bruixots Runners, con Aintzane Ruiz y Ivan Regalado, que han hecho un tiempo de 5h y 49min.
Entre los equipos masculinos, el primer grupo que ha acabado la etapa ha sido el Bifree; integrado por Albert Cot y Marc Serra, los corredores han hecho un tiempo de 4h y 26min. El segundo equipo, Axkoitiarrak, formado por Imanol Aleson y Ixaka Oñederra, ha tardado 4h y 43min completar la etapa. Cerrando el podio, en tercera posición y con un tiempo de 5h y 29min, hay Tuga Active Wear, el equipo de Dario Jose Dorta y Javier Rodríguez.
Y la clasificación femenina la encabeza el equipo La Sportiva-Mountain Medics: formado por Mirjam Steunebrink y Martine Hofstede, han hecho un tiempo de 6h y 12min. Con un tiempo de 6h y 14min, The Two, fomado por Iva Baronova y Adela Bodiova, han sido las segundas clasificadas. Y la tercera posición es para Mendikoloreak, integrado por Igone Campos y Ainhoa Lendinez y con un tiempo de 6h y 31min.
Mañana los participantes afrontarán una etapa de transición para entrar en la Cerdanya, pasando por Planoles, Dòrria y el Coll de la Cruz de Meians antes de llegar a Puigcerdà tras 37,4km y 1700m d +.
Crónica personal del equipo de Territorio Trail Media, por David Sánchez
Se puso en marcha la @Pyrenees Stage Run en el gerundense pueblo de Ribes de Freser con el objetivo de llegar a Salardú. Por delante 240km, 15.000 metros positivos, 7 etapas, 5 parques naturales y dos países. Casi nada…
El primer regalo, no se puede llamar etapa a algo tan hermoso, ha discurrido entre Ribes de Freser y Queralbs. 34,7km y 2190m positivos. Las parejas de corredores se amontonaban en la línea de salida de una bonita y clara mañana de agosto donde se respiraban esos nervios que siempre preceden a una gran aventura. Porque esta carrera es eso, una gran aventura por unos sitios idílicos que sacia los más exigentes paladares de los corredores de montaña. Porque si hubiese una categoría donde se premiara las veces que te paras, miras y dices “guau” el día de hoy tendría concedido muchos puntos. Una salida rápida ya dejó en cabeza a los equipos que se iban a disputar la carrera mientras el resto del pelotón empezaba lo que iba a ser una jornada que nada tenía de prólogo sencillo, como ya avisaron sus directores.
Los primeros kilómetros han sido de una subida ininterrumpida donde casi se completó el desnivel del día. Primero por una pista llevadera y luego ya a través de un tupido bosque en un serpenteante sendero hasta alcanzar cotas sobre 1800 donde la vegetación desaparecía para dejar unas vistas espectaculares de este parque natural de la Cabecera del Ter y Freser hasta la cima del Balandrau (2585m) donde no queda otra que poner brazos en jarra e ir dando la vuelta para tener una vista panorámica de unas montañas únicas. Pero el descanso dura poco porque una bajada trepidante por pastos resbaladizos te lleva hasta el refugio de Coma de Vaca. La bajada dura hasta ahí porque la exigente travesía por el Camino de los Ingenieros, que no da tregua de subidas y bajadas por lugares expuestos y pasos con cuerdas fijas, te lleva al Santuario de Núria, un lugar impresionante con un lago y lugares para esparcimiento familiar que en los meses de invierno son unas concurridas pistas de esquí a las que se accede únicamente por senderos o por el tren cremallera.
Cogiendo uno de esos senderos, el camínalo Vell de Núria, se va directo hacia Queralbs por una bajada rota que no da descanso mientras se compite con el tren por llegar al pueblecito de montaña, algo solo en manos de portentos como Jan Margarit. La llegada recibe a los corredores en un aplauso de sus familiares y cariñosos voluntarios y los corredores más rápidos, que ya disfrutan de un avituallamiento bien ganado y una fuente donde refrescar las piernas con la mente ya pensando en la etapa, el regalo perdón, de mañana.
La etapa de hoy fue en categoría femenina para el equipo formado por Mirjam Steunebrink y Martine Hofstede, mientras que en chicos era para Albert Cot y Marc Serra y en equipos mixtos para Harriet Kjaer y Gerard Martinez.