La Pyrenees Stage Run (PSR) arranca este domingo 4 de septiembre y culminará el próximo día 10. Se trata de una carrera por etapas que atraviesa los Pirineos en siete días con una suma total de 240 kilómetros y más de 15.000 metros de desnivel positivo. Organizada por BiFree, la carrera se inicia en Ribes de Freser y finaliza su recorrido en Salardú, recorriendo cinco de los parques naturales más icónicos del entorno y resiguiendo el clásico GR11. Un recorrido que dejará fascinados a todos los participantes por su belleza, con una gran variedad de terrenos: pistas, caminos, senderos, bosques y algunos tramos técnicos y rocosos en alta montaña aptos para todos los amantes de la montaña y del deporte de resistencia.
La carrera es una experiencia única y exclusiva para disfrutar de la inmensidad de los Pirineos con un gran ambiente de convivencia. El compañerismo y los momentos compartidos se acentúan más allá de la competición, dando la oportunidad a los participantes de conocer otros corredores de todo el mundo y vivir juntos historias increíbles. De hecho, la prueba se completa en equipos de dos o tres corredores, un factor interesante, que no solo aporta un plus de seguridad a los participantes, sino que también consigue reunir personas para que compartan esta aventura épica.
Se trata de una carrera que combina la pasión por el trail running y el turismo deportivo, donde la experiencia va más allá de cruzar los Pirineos, porque al acabar las etapas, los corredores cenarán juntos para celebrar la entrega de premios y rememorar la etapa del día con las fotografías y el video resumen de la jornada. Además, un equipo de casi 50 personas velará para que los corredores tengan todo tipo de servicios, sin tener que preocuparse de nada más que correr y disfrutar de la montaña. Entre otros servicios, habrá servicio de fisioterapia o un seguimiento en directo de todo el recorrido. Además, dentro de la inscripción de los participantes están incluidas ocho noches de alojamiento que ha buscado la organización de la carrera.
La sexta edición de la Pyrenees Stage Run contará con 33 equipos, con un total de 70 participantes inscritos, con un 70% de procedencia internacional. Está confirmada la participación de corredores de más de 14 nacionalidades diferentes, como Canadá, México, Alemania, el Reino Unido, Irlanda, Países Bajos, República Checa o Dinamarca. Alemania es el país que aporta más inscritos con el 21%, mientras que habrá un 7% de británicos, suizos y daneses. El 21% de los inscritos son españoles. Algunos de los inscritos que no se han querido perder esta fantástica oportunidad son Klaus Kiessler, austríaco que participará por quinta vez en la
competición, acompañado por segundo año consecutivo de su hija Kimm Kiessler, o el equipo alemán Team Lichtenstain Trail, integrado por Elasser, Krehl y Zeiler, este último seis veces campeón de trailrunning en Alemania.
El recorrido es un itinerario lineal, con grandes desniveles e impresionantes escenarios de montaña. La primera etapa dará el pistoletazo de salida en Ribes de Freser con la meta en Queralbs, pasando por lugares míticos como el Balandrau o el Santuario de Nuria. La segunda etapa cruzará dos picos de 1.900 metros de altitud y acabará en la capital de la comarca de la Cerdaña, Puigcerdà. La tercera jornada será la más larga del circuito: los corredores cruzarán la Cerdaña y entrarán en territorio andorrano, hasta el municipio de Encamp. Así, en el cuarto día de carrera, los participantes se moverán íntegramente por el Principado, teniendo tiempo para recuperar energías de cara a las últimas tres etapas de la aventura. La quinta etapa saldrá de Andorra, pasando por el lado de su cumbre más alta, el Comapedrosa, y bajando hasta buscar la bucólica población de Tavascan. En el sexto día de competición, los corredores atravesarán el parque natural del Alt Pirineu, hasta aparecer en la población de Esterri d’Àneu. La séptima y última etapa que cerrará el circuito, cruzará el parque nacional de Aigüestortes y el lago de San Mauricio, para entrar en el Valle de Aran y llegar triunfalmente a la población de Salardú. Todo ello, conforma una experiencia exclusiva por los corredores, que compartirán siete días de emoción coronando los cuellos más emblemáticos del Pirineo, recorriendo subidas y bajadas que quedan grabadas a la memoria, disfrutando de insuperables vistas panorámicas y poniendo a prueba su resistencia y habilidad en equipo.