El pasado mes de marzo, Kilian Jornet anunciaba su calendario de actividades para este 2023. Un calendario en el que participará en pocas carreras (solo se ha confirmado su participación en Sierre Zinal el próximo mes de agosto) y en el que incluye su vuelta al Himalaya esta primavera por quinta vez. Tres intentos fallidos de ascenso al Everest en 2016 (llegó a los 8.000m), 2019 (se daría la vuelta a los 8.300m por fuerte viento) y 2021 (con David Göttler), tendrían su recompensa con el doble ascenso al Everest en 2017 (con récord incluido), queda por saber qué proyecto ambicioso barrena dentro de la mente de Kilian.
Pues bien. En declaraciones de Tashi Lakpa Sherpa , director de Expediciones SST/14 Peaks en The Himalayan Times : “Gestionaremos la expedición del mejor corredor por montaña del mundo, Kilian Jornet, que tiene como objetivo escalar el Everest y el Lhotse sin utilizar oxígeno suplimentario esta temporada”. Esta afirmación ha sido corroborada por la empresa Outfitter Seven Summits Treks en Explorers Web : “Le pedimos detalles a Jornet, pero no quiso compartir mucho. Nos dijo que tenía permisos para varias cumbres pero sólo decidirá al momento, según las condiciones” .
Jornet aterrizará en Nepal en gran forma. De hecho, la semana pasada enlazó las siete cumbres principales de la cordillera de Romsdal noruega, combinando tramos de esquí y escalada alpina, acumulando un total de 76,5 kilómetros y 9.257 metros de desnivel positivo en menos de 24 horas.
El nepalí Mingma Dorchi Sherpa establecía, el 27 de mayo de 2019, un nuevo récord de velocidad para la travesía Everest-Lhotse , marcando un tiempo de 6 horas y 1 minuto según su GPS. Eso sí, con la ayuda de oxígeno artificial . Hacerlo a pleno pulmón sigue siendo uno de los mayores desafíos del Himalaya que nadie ha logrado nunca . Un reto perseguido por el alpinismo que hoy perdura intacto. ¿Y si fuera éste el reto que prepara Kilian Jornet?
En mayo de 2018, dos parejas de alpinistas lo intentaron sin éxito. El rumano Horia Colibasanu y el eslovaco Peter Hamor decidían abandonar por el alto riesgo de aludes y las placas de hielo de la arista oeste del Everest, mientras que el británico Jon Griffith y el nepalí Tenji Sherpa desistían por la vía normal, la arista sudeste, después de culminar el Everest.
La travesía Everest-Lothse hizo soñar al malogrado suizo Ueli Steck, uno de los grandes mitos del alpinismo, fallecido en 2017 en el Nupse cuando preparaba precisamente este proyecto ambicioso. Kilian y Steck se conocieron en el Himalaya en mayo de 2015 y ambos no necesitó ni mediar palabra porque hablaban el mismo idioma, alpinísticamente hablando. Su afán por un estilo ligero les llevó a compartir experiencias. En noviembre de ese mismo año escalarían la norte del Eiger en estilo ligero y, como bien explicaría Jornet “fue una clase magistral de alpinismo”.
El nepalí Nirmal Purja es el actual poseedor de otro récord: el de velocidad al escalar el Everest y el Lothse sin oxígeno suplementario . En 2022 conseguía este hito invirtiendo un total de 26 horas. Primero escalaría el Everest (8.848m) el 15 de mayo, bajaría al Coll Sud para tocar el techo del Lothse al día siguiente (8.516 m). Además encadenaría las cimas del Kangchenjunga (8.586m), Everest y Lhotse (8.516m) -3a, 1a y 4a montaña más alta del planeta- en tan sólo 8 días, 23 horas y 10 minutos, sin utilizar oxígeno suplementario.
Texto: Albert Torrent – Ultres Catalunya